CARTA A CLAIRE.1
Finalmente un viejo loco, enredado en descubrir dónde está la salida. Tiene su gracia. Veo los sauces donde tantas veces rasgué mi piel de niñez, donde grabé sobre resinas engañosas la voluntad de ser osado ante la adversidad. Soy tan débil como las cortezas que torturaba con soliloquios del "yo" indefenso, esgrimiendo un arma punzante y difícil de utilizar. Soy efímero Claire, un viejo loco que no encuentra el papel que le toca interpretar. Me faltan años de impaciencia para lamentarme más, quizás por eso sea un gruñón, carezco de arrojo e intento suplirlo con parches que duelen menos... Aunque soy irresistible, lo sé. A veces me veo reflejado en caras anónimas tan despiertas que deslumbran y quisiera mutilar su vivacidad porque... porque son la esencia de todo lo que yo sólo he sido en mis ratos libres... "El héroe de un segundo". Mi vida entera vendiendo teorías fundamentadas en la búsqueda del bienestar y amanezco cada día con la misma sensación de masticar el serrín de mis pensamientos. Siento pena de mí, vergüenza de ser tan cobarde como las confesiones por escrito.
Si sustituyes la palabra "confesiones" por "notas"te atreverás a escribirlas :) En un mundo de pecadores no puede haber confesiones, únicamente historias :)
ResponderEliminarun abrazo
Bueno, de mi está el subconsciente. Paul es un personaje (De un montaje que escribí hace años) y como tal dibuja su fragilidad con retazos de lo que él cree que es o debe ser su redención. Un ser pusilánime que quisiera ser más valiente que su propia cobardía de no poder mirar a unos ojos... El resto, estoy contigo... Todo vale y no hay juicio. Un besote.
ResponderEliminarNo me gusta la gente que no mira a los ojos, tampoco me gustan los cobardes... Por lo demás, buen texto, ;).
ResponderEliminarSaludos
GINCRISPI: El mundo está repleto, a veces yo soy cobarde y supongo que Paul es la imágen corpórea de mis frustraciones. Una etapa. Un personaje... La vida misma jeje... Un abrazo.
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