miércoles, 25 de diciembre de 2013

LA REVOLUCIÓN DE LOS NIÑOS (O DE COMO PERPHEKTA SUCUMBIÓ ANTE EL PODER DEL ARTE).


    Esta historia sucederá en un tiempo futuro, un tiempo ni tan alejado que nos permita respirar, ni tan cercano que nos hiele la sangre… En cualquier caso las historias se han de contar como sucederán… y esto, tarde o temprano, sucederá... créanme. A no ser que algún elemento inesperado cambie este complicado amasijo de emociones y ambiciones que es la vida…

     El caso es que en ese tiempo futuro, el que ha de venir… sucederá que… No, no, así no se puede iniciar nada… un condicionante severo este del devenir… dejaré pues de hablar en futuro, que me siento amenazado al contarlo, hablaré mejor en presente… cierta resignación es apropiada para implicarse con lo que ha de suceder, eso que aún no ha sucedido…Aunque si hablo en presente no hay solución y el tono descriptivo será más tremendista y vivencial… no, tanta pasión no debe ser buena; mejor hablo en pasado y preservo el clásico hilo conductor de la narración, para habituar el oído a la melodía penetrante del cuento o de la fábula, sí señor. Esta es buena solución. Hablar en pasado insuflará al relato cierta esperanza… quedará la puerta abierta a un cambio que aún está por venir… Todo viaje iniciático tiene su recompensa…sí, me gusta. Mucho mejor en pasado… cómo no lo había pensado antes…

    Pues bien, cuentan que esta historia sucedió cuando las preguntas eran más frecuentes que las respuestas, cuando la ilusión se cubría de una fina capa de plomo y los sueños eran instrumentos de libertad censurados por la tiranía de un Imperio adormecido conocido como Amnesia… Solamente los viejitos, seres conocedores de tiempos inmemoriales y mundos ancestrales, se permitían pequeñas licencias privadas en la intimidad del hogar. Eran pues el oxígeno que respiraban algunos niños inquietos cada vez que palpitaba una curiosidad irrefrenable en su interior… Sus cuentos buscaban dar razones precisas a las preguntas de los vástagos, no sólo intelectualmente, también en el plano espiritual. El ritual de la narración podía ser penalizado seriamente por el Imperio, iba contra toda norma ética, de ahí el anonimato que confería el hogar a tremendo acontecimiento de insurrección. Por otra parte abuelitas y abuelitos acostumbraban a cerrar sus relatos con una frase consensuada y universal, pero secreta, que decía algo así como: “Y los niños vivieron como quisieron vivir”… Pobre de aquel anciano que fuera descubierto en su perversión… desmemoriado, exiliado y abandonado sin el olor de la infancia. Repudiado por todos, en definitiva. Por esa razón era tan importante ser discreto… y, por ende, muy constante en la lucha contra el Imperio de Amnesia y su Sociedad PerpheKta.

    Sociedad PerpheKta, era un sistema creado a partir de los criterios abusivos de producción y discriminación para nivelar el desequilibrio inherente a una civilización demasiado implicada en el plano emocional y sensitivo. Sencillamente no interesaba humanizar, ni cultivar la curiosidad. Siguiendo estas premisas quien no producía lo suficiente para enriquecer al sistema o quien no respondía a la demanda del mismo, es decir, seres débiles, no formados, personas de otras etnias o incluso enfermos… era directamente trasladado al departamento de Transformación donde se le aplicaban técnicas altamente cualificadas para optimizar el producto humano y hacer de él un ser dócil, abnegado y eficiente… Si aún así se resistía al cambio… Bueno, si eso sucedía… sólo quedaba el destierro, un destierro irrevocable y cruel llamado “El abandono”. El Presidente de PerpheKta, el Señor Tajante de Ambitia, un lejano reino de codicia sito en las lindes del Valle de la Perdición, era un tipo intransigente y con carisma, que había encontrado el elemento distorsionador del equilibrio humano. Descubrió que el sentido de la utilidad debía estar siempre por encima del espíritu creativo, el arte supeditado a la efectividad, el proceso personal anulado por la productividad y las preguntas silenciadas por el murmullo constante del miedo… ese que paraliza y que convence de las inconveniencias de ir en contra de lo establecido.

    Aquel Imperio no fue creado a partir de la nada, fuerzas malignas y bien seleccionadas por la mente pérfida de Tajante, participaron en la operación contra la especie humana más calculada y fría que se haya escuchado jamás. Las Inánimas, sombras antiguas sin remordimiento ni afectos declarados, eran participantes activas y sigilosas de unos planes, los de Tajante… que un día llegaron a consolidar aquel reino implacable de desidia y oscuridad invisible.

    La vida en las calles se regía por la métrica perenne de un tic-tac que medía el rendimiento y que marcaba el ritmo constante por el que guiarse en cada pequeña acción. Rascarse la nariz era un tic, agacharse un tic, tac, tic, tocar a una puerta un tic, tac… correr podía suponer una sucesión infinita de tics y de tacs que se contabilizaban en el Contador de tictacs, más conocido como “La esponja negra”. Medidor de impulsos reales que daba como fruto un papel en el que el esfuerzo humano estaba pormenorizado en apartados como destreza, constancia, resistencia, afán de superación y resultado. La máquina culminaba su valoración con una A que significaba Apto o una D que aludía a la deficiencia y designaba advertencia, peligro y supervisión… 3 Des suponían exilio y un no retorno a la vida en Amnesia, en consecuencia... el olvido eterno.

    Las Inánimas cumplían esa función de supervisión, no sólo en las calles, también en los hogares y en las escuelas… donde la educación debía pasar por ciertos filtros nada ortodoxos que anulaban cualquier opción de los niños a crecer en libertad. El tic tac no les era ajeno, los resultados regían su evolución académica y la espontaneidad o la diferencia eran marcadas con una estrella negra en su indumentaria, símbolo del miedo en el Imperio de Amnesia. Estigma para sus portadores y amenaza para todos los que observaran la inequívoca insignia.

    Esta historia no habla de buenos y malos, sino de ciegos e interesados, de hechiceros del tiempo y corderos descarriados, de sometidos y alzados, de poderosos y derrocados… pero fundamentalmente de cómo los niños consiguieron utilizar el arte y el juego para alcanzar su revolución… Una fisura para Perphekta, un halo de luz para todos.














































domingo, 8 de diciembre de 2013

LA INTIMIDAD DE MIJA




El judío está lavándose en un barreño de escasa amplitud. Se encuentra a solas en una habitación oscura y húmeda. El agua está fría y tararea una canción. Se muestra ausente, su cadencia le delata.


MIJA: Quiero ser el niño que un día se encuentra con su sombra; el mismo que hace creer a todos que está loco pero que, en el máximo exponente de la cordura, se protege del peligro de implicarse con sus propias emociones. Quiero despertar siendo ese niño que inventa un amigo, un inocente y dócil acompañante que en nada contraría, que siempre hace por escuchar y que nunca desaparece del todo. Ahora mismo estaría aguantando vómitos y tormentas sin importarle lo más mínimo, sin dolor ni reproches. Su rostro no se sentiría incómodo al sentir palabras de desaliento, yo lo notaría sólo con verlo. Nos tocaríamos sin tocarnos, nos amaríamos en cada anochecer como dos amigos que necesitan experimentar con sus cuerpos. Jugaría con él a crear formas del todo imposibles y nos reiríamos de las batallas perdidas, ayudados por la composición de un elefante con dos trompas. Dibujando figuras en el vacío, dejaría de pensar que me siento así. Vacío. Siempre pensé que la vida sería algo diferente a una tortura. No es que respire compasión, es que pienso que el sentido de mis días ha sido lapidado y sepultado bajo los escombros de una casa en ruinas. Una vez rota y desvencijada, todo es silencio. Perezco lentamente invadido por inevitables preguntas. Pienso que allí, en ese contenedor de deshechos que es el alma, nadie buscará objetos perdidos, recuerdos, maletas, ropas que no hayan sido dañadas. Era vieja y ya no estaba habitada, dirán. Después de un rato asomaré la vista entre dos vigas de madera. Nadie en el horizonte. Sencillamente se habrán marchado todos. Ninguna nota bajo el felpudo. No han querido saber, no han indagado las causas, hay cosas más importantes que una casa en ruinas. Y yo me pregunto ¿Cómo puede un ave Fénix resurgir de sus cenizas cuando no existe la motivación vital? Soy un punto y a parte, en la historia, en mi historia. Construirme a mi mismo es un deseo que nace y muere en mí y esa es demasiada carga para un niño grande sin sombra. Quiero cerrar los ojos un instante, encontrar una sola idea que me aleje del deseo de permanecer escondido en la desidia. Los hombres deben construir su destino ¿Pero qué pasa si el destino ha sido alterado sin contemplaciones? ¿Cómo puedo ser hombre, si me han hecho sentir residuo? ¿Cómo abandono al niño herido si el hombre no ha podido vivir su tiempo? ¿Qué hago cuando la ausencia quiera abrazarme?

Fragmento de "La joven del Vístula". Enero 2.011.

lunes, 25 de noviembre de 2013

FREAKY MOMENTS IV


Vuelvo al ataque con nuevos y suculentos vídeos que me recuerdan, sin paliativos, la riqueza y complejidad del ser humano, lo extravagantes que resultamos todos en nuestras manías y aficiones particulares y, por qué no, las ganas locas que tengo de reírme de todo y de todos. Que es tan sano como reírse de uno mismo... 

1-Quiero cantar como ella...joder: Aquí, la tenéis, una clara aspirante a niña prodigio, bien educada por un padre excesivamente orgulloso o una madre frustrada en el artisteo... Y el fruto llega en forma de adolescente furiosa, obstinada y un tanto cazurra... Dispuesta a todo por un sueño.


2-¡A callarse todos coño!: Nuestra princesita, reina en otro tiempo del trono de la hamburguesa caramelizada, tiene un mal día y nos lo hace saber esgrimiendo un poderoso e irrefutable argumento, ejem...Y Dios le otorgó la palabra!



3-Mamá, quiero ser artista... :  Por favor... Hay padres muy enfermos, te lo digo desde ya... Esa niña es un verdadero monstruo gestado durante largas horas frente a una pantalla, mimetizando cualquier cosa que podamos catalogar de admirable. Una niña freak que otorga escaso o nulo protagonismo a su tímida acompañante y que se come literalmente a la presentadora y a su estrambótica estrella, a la que admira y eclipsa en partes iguales. Sin comentarios.


4-¡Vamonos de paseito, chicos...! :  Quizás sea un tanto cruel por mi parte, pero la distancia tiene estas cosas... Los veo y no dejo de pensar en lo super guays que son y en cómo fardan de yate y de nenas y de pose y de... en fin, qué más da... cuando te das una buena ostia eres tan humano como todos... pero a mi mente perversa le hace más gracia así...


5- Máster en peluquería doméstica...oh, oh... :  Si una adolescente se entrega a la causa de enseñar sus conocimientos capilares, lo menos que podemos hacer es seguir sus consejitos con cuaderno en mano y una buena actitud, nunca se sabe cuando vamos a necesitarlos... Que linda chica desbordando su arte hasta extremos insospechados...


6- Volad, volad, pajaritos... :  Cuando se agudiza el ingenio a uno le da por experimentar... Bastan el deseo de probar cosas nuevas, un objeto rodante y un motor para comprender que la ciencia no tiene límites... Aunque la física diga lo contrario... 





7- Volar no tiene edad... pero tiene sus cosillas:  Cosas que son buenas descubrirlas por una misma, como esta abuelita tan dispuesta y simpática que ha olvidado un pequeño y transcendental detalle... No se puede estar en todo y que le quiten lo volao...


 8- :Equivoqué mi camino...Gracias por descubrirme la verdad:      Esa candidez tan genuina, que embelesa al más avispado y docto de los intelectuales, esas miradas tan cómplices, esas sonrisas tan sinceras, tan propias de quienes representan la humildad y la honestidad en su máximo exponente... y qué argumentaciones!!! Recomiendo bolsa para vómitos cerquita... Como diría mi amiga Lola, estos sí que son frikis...



9- :Tranquilos todos...los grandes hombres nos protegen:     
 Si es que no hay nada como una buena formación militar y unos amplios conocimientos en armamentística para garantizar la paz mundial en el mundo entero (exceptuando esos pequeños daños colaterales de nada...)... Aaaaay... los hombres y sus peculiares inventos... Son como niños jugando a la guerra.


10- : ¡Ay qué listo es mi niño y qué bien le sale tó!!!:     
 Todo un talento el de este chico...y estilo no le falta... No contento con la transgresión que está a punto de acometer, el niño está a puntito de demostrar al mundo que las carambolas de la vida son una admirable manifestación proporcional a la estupidez con la que se elaboran estas cosas... Otra vez te lo piensas dos veces chato...


Bueno queridos míos... que frikis somos todos y que mis torpezas son reconocidas en toda la comarca así que, que vivan las bizarradas humanas y sus ejecutores. Besotes y disfrutarlo.

martes, 12 de noviembre de 2013

APARIENCIAS...


Aparentamos que somos felices, una sonrisa encubriendo el desfile de máscaras y corazas en las que refugiamos la esencia y la verdad para que sean inaccesibles, imperturbables, anónimas, recónditas... Y todo con el propósito indoloro de conseguir no reconocernos un día y soportar mejor la mentira existencial que nos cubre, como un manto de luciérnagas apagadas o como el viento cuando mece la hojarasca impávido, mientras repica una campana en algún lugar... Vendemos una ficción indigesta para ahuyentar todo resquicio de dudas sobre la armonía reinante, una ficción insoportable en horas de recogimiento, cuando nos arropamos entre olores confortables y una compañía no del todo deseada... Pero qué puede importar un día más... Cerramos los ojos y musitamos frases invisibles que hablan de esfuerzo y de búsqueda de razones inexistentes que sostienen ¿qué? Tal vez la esperanza de un cambio, quizás sólo un aliento, más profundo si cabe, para afrontar la farsa insostenible que hemos decidido llevar a cuestas... Una vez montado el escaparate, sólo aspiramos a ser observados sin juicio, con la sonrisa edulcorada y todo impolútamente colocado aunque el alma mendigue una tregua con desesperación y la sombra nos quiera abandonar de pura desidia. Hemos hecho creíble un modo de vida tan vacío como destructivo. Casas sin cimientos, heridas embozadas para que no sangren, palabras evasivas y un sinfín de trucos mágicos a los que dotamos de credibilidad para que confirmen todas esas hipótesis que hablan de "ocultar para sobrevivir". Hoy, hablando con una amiga que ya no siente a su acompañante de vida, pero sí que su vida se desmorona... hoy, he visto claramente que nadie nos educa para reivindicar o aceptar la verdad, aunque sea dura... Por contra, la primera lección aprendida sigue siendo...No sufrirás, cueste lo que cueste... terrible alegato de parálisis, aleccionador y firme, extendido y universalmente aceptado por todos... No es casual que este Blog abandere un lema tan contundente, es mi apuesta... Si hablo en plural es porque no pretendo resultar pretencioso acaparando la verdad como verdad absoluta que no me salpica... Todavía, en ocasiones sigo vistiendo ese traje que confunde el bienestar con la lucha, la pasividad con la acción, la seguridad con la responsabilidad, pero cuando siento que me arropa, ahora, al menos ahora, consigo decirme... quiero ser de verdad... Y aunque no siempre es una certeza, porque ser coherente es de las cosas más difíciles de alcanzar en este camino... sigo intentándolo, con menos temor y más constancia. Ayer me sentí bien conmigo mismo por ser capaz de hablar de mis verdades sin que ella, mi amiga, sintiera miedo de reconocerse en su mentira.












domingo, 27 de octubre de 2013

LA VIE EN ROSE





CLAIRE: ¡ Brindo por mi vida ¡ paradigma de buen gusto y savoir faire. Brindo por ser feliz en el planeta de las miserias y por no haber vendido ni un solo palpitar a los fanfarrones que persiguen buena voluntad (tose) Por las tardes sin horizonte y los horizontes que llegaron siempre tarde. Brindo por haber matado mil ideas estúpidas que hubieran hecho de mi una persona distinta, por mentir para salvar a la niña que nunca pude ser, por guardar en un bote oxidado los besos que nadie robó, por enterrar vivos los sentimientos que en una ocasión parecieron florecer allá en ninguna parte...Brindo por... hummm...¡y yo que coño sé por qué brindo! Brindo porque ya no quedan vecinos en la finca, todos marcharon, incluida la señorita Paulette que taladraba nuestros tímpanos con su ferviente deseo de ser cantautora. Brindo porque sí...¿no es ese suficiente motivo? (Después de una pausa necesaria) Brindo por mis padres que están en el cielo (mira hacia arriba con prudencia y levanta la copa, orgullosa). Por ti mamá, que supiste enseñarme todo lo que sé y lo que más valoro en ésta terca vida...Ser una buena mujer, sí señor, eso es....¡Por ti! (mirando hacia la cuarta pared) ¡Shsss!, por él no me pregunten, tengo prohibido hablar de sus silencios (con cara de complicidad) una vez quise saber por qué metía su mano por debajo de mi falda con tanto afecto: (imitando su voz) “a veces el silencio es la mejor arma para el  entendimiento”. Eso fue lo que me dijo, así que yo, a callar (Con súbita expresión de dolor) Odio estos malditos zapatos, me aprietan demasiado (Se los arranca enérgicamente y los lanza contra la pared) ¡Aprended a cuidarme atajo de necios! sólo servís para recordarme que tengo unos pies feos ¡Os meteré en un armario oscuro cerrado bajo llave para que os replanteéis vuestra utilidad!...(corrigiendo su voz desorbitada)... que en cualquier caso no es joderme viva. (Mirando de nuevo al frente, un tanto avergonzada) Disculpen mi tono elevado y carente del más mínimo decoro pero soy tan imprevisible como Adán en un huerto de manzanos. Sí, ciertas personas me acusan de ser una mujer de carácter, pero yo prefiero definirme rotunda en la acción e inflexible en la palabra.


      JEAN-PIERRE: ¡Mááá!.

CLAIRE: (Con la cara iluminada) Ese es Jean-Pierre, mi hijo. Permítanme que brinde por él, porque es la alegría de mi vida. (Bebiendo de un trago lo que le queda por beber) ¡Ya voy cariño!. (Con cierta afectación, después de humedecer sus labios) Hay cinco segundos en mi memoria que morirán con mi expiración, los cinco mágicos segundos que Dios me regaló al depositarlo en mis brazos por primera vez. Mientras le miraba en la bruma de mi dicha, escuchaba los sollozos de aquellos que lamentaron su existencia. El nació sin llanto, ni movimiento, ni cara despierta; pero a cambio de mi abrazo protector me ofreció una sonrisa. Ellos deseaban su muerte, sus felicitaciones eran la invitación para un requiem clandestino en su honor. Ellos deseaban lo mejor para mi..... Pero cómo podían siquiera pensar algo así. Yo me comprometí con su sonrisa, juré protegerla de injurias y falsas amistades... (emocionándose en el transcurso de su narración) tenía su palpitar reposando en mis pechos de amor insobornable; a mi alrededor, una jauría de rostros desencajados, censuraba mi intención de entrega para toda la eternidad....”La eternidad a cambio de un monstruo”, decían.....Tuve que ignorarlos. Le miré fijamente a los ojos y le dije, escúchame: (cerrando los ojos) “ Escalaré las paredes del infierno para darle calor a tu cuerpo, cerraré con cremalleras las bocas sedientas de tus lágrimas, no habrán miradas que se posen en tu piel de alabastro, ni pecados que tienten tus pensamientos en la oscuridad, nadie tocará tus manos para robar caricias y si alguien comete el error de juzgarte, castigaré su torpeza en el primer crepúsculo, condenándole a recitar mil formas diferentes de pedir perdón... (Mientras pronuncia estas palabras, que suenan a sentencia, sus manos se irán agarrotando y su mirada se tensará en exceso)...hasta que su voz sea un leve susurro tan inofensivo como tu   aliento”                                                                                                                                          JEAN-PIERRE: ¡Máááá!.
        CLAIRE: (Secándose alguna lágrima involuntaria) ¡Ya voy, espera que tengo visita!. En cuanto tenga un rato se lo presento, verán que es encantador. (Respirando ansiosamente) Brindaría por Paul, mi marido, pero está débil del corazón y festejar es sinónimo de excitación; el médico le ha prohibido todo contacto con la efusividad. Yo ya estoy acostumbrada, aunque a veces tengo ganas de recordarle que no es un muñeco de cuerda, no sé si me entienden...


lunes, 7 de octubre de 2013

LA GAVIOTA I





     Es una de esas mañanas perfectas que templan el rostro y acarician el alma. Percibes que el aire es demasiado plácido para ser cierto, la luz resplandeciente y vívida, las miradas acogedoras, el mar un remanso de paz sin ese constante fulgor del rompe-olas. Reina la calma y las voces de los pasantes son un murmullo adormecedor, casi una letanía. Huele a "Fruits de mer" y el estómago parece manifestar su vertiente más activa, de momento sólo una "Alhambra" y unas olivas. Es entonces cuando suena un saxo. Sólo falta el sexo, pero  no es apropiado en un paseo marítimo (Al menos no en pleno día). Piensas en voz alta que tus sentidos gozan del deleite de una plácida mañana, inalterable y hermosa. Nada puede estropear lo que sientes. Sacro error. Justo en la fracción de segundo inmediata al pensamiento, cae sobre ti un regalo del cielo. Es líquido, verde y cálido. Podría ser el "pesto" que el niño holandés de la mesa de al lado ha hecho volar hasta tí, por encima de la cabeza de su padre. Pero no. Viene de arriba. Las teorías absurdas que rondan tu cabeza aterrizan finalmente en un significado real. "Caca de gaviota" .Para ser más precisos, diarrea. Tu inmaculado ropaje tiene tres pequeños visitantes verdes. Al igual que el cojín del sillón, la cerveza y las olivas (¡Démoslas por perdidas!). La gaviota anda suelta, pero sigue en su vuelo imperturbable sin alterarse lo más mínimo. Ella es la auténtica protagonista de esta historia. Y me dispongo a contárosla, con el sosiego propio de un vuelo que parece no alterarse ni siquiera cuando arrecia la tormenta.
    En Ushuaia estaba mal considerada por la productora de guano. Michaela aportaba el hediondo sedimento como asociada honorífica. Semi-líquido, masivo y grisáceo. El clásico residuo que enamora y que vende. Perfecto en el mundillo. La empresa hacía conocerse por su nombre "la vida suelta" y por estar en el culo del mundo. Pero la excrecencia de nuestra amiga alada cambió, sin más, de color. De una forma irreversible e inapropiada. Ya era tarde para intentar convencer. El producto genuino perdió calidad. Regurgitar arenques fermentados no era suficiente. Tenía que pagar el precio de su osadía. Las puertas se cerraron. Michaela alzó el vuelo en dirección a vientos menos huracanados, en su cabeza palpitaba ya la intención de deglutir su ira sin cagarse en todo. Con el pensamiento cautivado por la idea de ser de nuevo deseada, llegó a Montevideo, casi en un suspiro. Iluminada por los destellos del Río de la Plata en sus ojos verde aceituna. Decidió probar suerte. Por qué no, pensó. Pero la fortuna distaba mucho de ser una aliada. Uruguay no es nada guay si la alineación planetaria no está de tu lado. Ya se lo decía el horóscopo. No te guíes por impulsos o recibirás un golpe de los que te dejan tibia ¿Puede una gaviota entender las sutilezas de la humanidad? Se entregó sin miramientos a los encantos de un albatros marinero, enroscada en sus fuertes alas por aquello de paliar los brotes de dolor que aún bullían en su interior. La calidez poco habitual de aquel viril espécimen de ala robusta le hizo creer durante un segundo que estaba ante su salvador. Juan era su nombre. "El Gaviota" su apodo. Pero no era ningún héroe forjando su viaje iniciático. Era tan sólo un farsante, el equívoco reflejo en el que mirarse. No hicieron falta promesas vanas, ni ojitos encandilados, para tocar la tierra. El albatros obtuvo lo que necesitaba y se esfumó en una estela de mentiras tan doliente como el desengaño de haber quedado desplumada y humillada. Michaela lloró mirando el puerto. Las personas parecían no complicarse en exceso mientras cargaban aquel barco con cajas marcadas por un frágil mayúsculo. Como su corazón. como su aliento ¿Sería la vida más sencilla de lo que le parecía en ese momento? Alzar el vuelo era ahora un desafío. Continuará.

lunes, 30 de septiembre de 2013

LA CABEZA DEL CONEJO

                          


                           Persiguiendo un par de conejos
                       mi padre gritó desde lejos
                       ¡Aquí hay uno!
                       Y con gesto iracundo
                       y el rifle en el hombro,
                       disparó para mi asombro
                       a una coneja preñada.
                       Acción disparatada
                       de un matarife experto.
                       Y es bien cierto
                       que la coneja había muerto.
                       Tenía un ojo fuera                                                        
                       Y el otro medio tuerto.
                       Papá celebró la fechoría
                       Con alborozo y alegría,
                       sacó el cuchillo
                       hincando el filo
                       en su piel mancillada
                       y horadada por el cartucho.
                       Me cuesta mucho contarles esto,
                       pero es lo que yo vi
                       y aunque detesto entrar en detalles
                       Más vale que no me calle
                       y que todo el mundo sepa
                       el final de la coneja.
                       Revuelto de sesos,
                       papilla de huesos,
                       la sangre que inunda
                       paredes y suelo.
                       Filete de carne
                       cortado en cien partes.
                       Detritus, pellejos,
                       un nervio pendejo,
                       hígado, dientes,
                       pelos, riñones,
                       corazón palpitante
                       y esas manos sangrantes.
                       El feto que llora
                       ¡ha llegado la hora!

                       Un guiso en salmorejo

                       Y la cabeza del conejo.

          

domingo, 22 de septiembre de 2013

LA FRANCE (Mi lugar en el mundo... O de cómo embriagar los sentidos de recuerdos y vivencias).



Bueno, soy consciente de que me entrego muy poco a poco, que cuando hablo de mí, utilizo los subterfugios de la poesía, que mi lenguaje es descriptivo y un tanto abigarrado, que hablo poco de mi vida personal, al menos con claridad... Sigo siendo de esos que prefieren sugerir a decir... Sin embargo vengo dispuesto, en esta ocasión, a desnudarme plenamente. 



Vengo a hablaros de unas vacaciones relajadas que me han permitido abandonarme al noble arte de respirar... decir eso sería inexacto, inapropiado y demasiado práctico... Vengo a hablaros de "mi lugar en el mundo" que como bien predijo un tal Aristarain existe y está escrito en alguna parte y uno sabe cuando existe porque es capaz de sentirlo.


La mejor y más rica herencia de mi madre ha sido precisamente este legado tan vinculado a su tierra natal, en el corazón de Francia. Un paraíso rural poco transitado, lleno de magia y atardeceres, de noches estrelladas y naturaleza salvaje, de lagos, ríos, castillos, iglesias románicas y campos de cultivos, bosques frondosos y caminos... de esos en los que apetece perderse.



Pero en lo idílico de este reencuentro con la tierra y las gentes, subyace una pena...una herida abierta, un sueño recurrente que debía acallar. Os explico. La antigua granja de mis abuelos se ha puesto en venta... Podría entrar a desmenuzar las razones que han llevado a sus hijos a hacerlo, pero ya no quiero..siento que se pervierte algo puro para mí.


Yo sólo fui a despedirme, a enfrentarme a mis fantasmas, a cerrar un capítulo, de esos que uno jamás pensó escribir pero que son necesarios para iniciar un proceso de crecimiento en otra dirección. Cuando crucé el umbral de la puerta, entré en un mundo onírico, suspendido en el tiempo, donde el reino imperante de los sentidos surgió desde los poros de mi piel...


La casa estaba vacía de muebles, pero viva y despierta como nunca en mi imaginario. Todavía quedaban objetos diseminados a lo largo de los armarios empotrados de la casa. Olía a café y a desayuno, sonaba esa radio de éxitos de todos los tiempos que solía despertarme en el pasado, como una dulce melodía... el batir ansioso de alguna avispa revoloteando alrededor de la mermelada de fresa... el sonido de los neumáticos del coche del cartero con tres cartas para el joven y ajetreado nieto en vías de comunicación con sus corresponsales del mundo. Ya entonces le apasionaba escribir.


Y también estaban ellos, los de los cuerpos cansados y las sonrisas perennes, especulando sobre el tiempo, el campo, los animales, la vida. El leve crujir del parqué y la ventana con vistas al jardín en la que tantas veces asomé mi silencio y observé crepúsculos. Las estrellas más brillantes que nunca vi y la orquesta sinfónica de grillos que acostumbraban a adormecerme incluso cuando algo no iba bien... Y las fotos antiguas, donde aparecía mellado y con un lamparón en esa camiseta que vivió las mieles del éxito en los 80, mis hermanos aún cercanos y entrañables, las fiestas familiares, cada nuevo miembro, cada despedida...


En definitiva...yo, reconociéndome en cada pequeña percepción de vida, recogiendo la energía de las paredes, la presencia de mis abuelos y cada uno de los pasos dados en ese suelo ¿Cómo puede un lugar que se aleja tener tanta fuerza? ¿cómo pueden los recuerdos reavivar con una intensidad tal las vivencias del pasado? En definitiva ¿Es posible que el amor hacia las cosas sea el vehículo más directo de amor hacia los seres?



Me despedí de todas las cosas y de todos los seres, las vehementes exclamaciones  que proferí en el pasado por miedo a perder ese nexo...permanecieron en paz, no sin dolor. Pero acepté, simplemente acepté. Liberé ese sentido de propiedad inconsciente, para regresar un día, aunque mi lugar en el mundo ya no sea el que me dieron, sino el que yo construya. Atrás quedaron muchas cosas, no sólo los restos de un Peter Pan agotado de tanto uso, también cada uno de los instantes de sufrimiento que enturbian esta calma que ahora porto. Suenan... Brel, Montand y Piaf en mi cabeza...


Así ha sido, me llevé algún que otro objeto con fuerte carga sentimental, porque, a parte de ser diógenes soy un nostálgico empedernido...Lo tengo todo. Mi balance del año, ese que suelo hacer allí cada vez que tengo ocasión, se ha ejecutado calladamente, respetando mis emociones algo agitadas y respirando la tierra y sintiendo a las personas queridas con sus pequeñas miserias...A veces hasta en eso es bueno tomar distancia y dejar que las cosas simplemente sucedan. Os dejo...


CON MI LUGAR EN EL MUNDO...





domingo, 8 de septiembre de 2013

REVOLUTIONARY ROAD


    Uno se queda tocado y hundido cuando cae el telón de esta adaptación de la novela "Vía revolucionaria" de Richard Yates, expresión más que apropiada si consideramos el carácter eminentemente teatral de esta pequeña joya del celuloide que sirve para unir en la gran pantalla, una vez más, a estas dos bestias de la interpretación cuya química es una celebración escénica, en toda regla, de madurez envidiable y de solvencia. No negaré que la Winslet es mi debilidad junto a Moore o la Kidman y afirmo que Di Caprio me suele dar cierta grima en su grandilocuencia...Pero cuando hay que quitarse el sombrero uno es un señor... El director es Sam Mendes, alguien a quien admiro profundamente por otra gran "radiografía humana" como es "American beauty".
    No desmenuzaré el argumento, porque para eso ya tenemos a nuestra Troyana, especializada en "Anatomía fílmica con delicadeza reflexiva"pero si comentaré algunos momentos y sensaciones que merecen ser compartidos...
1- El eterno debate entre lo que se "tiene que hacer" o lo que "uno siente que quiere hacer", se sirve en la mesa desde el inicio...ella actriz...él bussiness man con opciones a escalar en el complicado mundo empresarial... y también está "el sueño americano", cómo no, dispuesto a corromperlo todo y a sembrar la desidia en ese mundo de aparencia en el que tan bien parecen desenvolverse sus personajes...
2- La conexión de April Wheeler (Winslet) con el título viene determinada por la necesidad de un cambio existencial urgente que sufre el personaje para salvar la vida de su pareja, la suya propia y el sentido de su convivencia. A mi me recuerda a Nora Helmer, un personaje teatral que revolucionó la literatura universal con su decisión transcendente. Para los que hayan leído o visto " Casa de muñecas"... ya sabéis de que hablo. Para los que no... una invitación. April, como Nora, no soporta la idea de abandonarse a la monotonía y a la desesperante idea de una vida organizada y aparente.
3- El personaje del "loco atormentado" (que interpreta, magistralmente, un desconocido Michael Shannon) representa, bajo mi criterio, la clarividencia y la cordura en un mundo de corderos sin voluntad. Se trata del hijo desequilibrado de unos amigos de los Wheeler y posee una de las mejores escenas de toda la película. Aquella en la que retrata a los protagonistas, cual analista social sin remilgos ni ganas de complacencias, mostrándoles el reflejo real del escapismo y la falta de voluntad de la que adolecen en ese espejo en el que jamás se han observado. La vacuidad de una existencia que cree vivir de la felicidad, pero sólo se nutre de subsistencia. Su poética crudeza es una delicia.
4- La ficción, vivir de la ficción, vivir en una mentira, aparentar... y querer ser de verdad. Ya sabéis que aquí, en mi pequeño lugar... me gusta hablar no sólo de las certezas, sino de los caminos que construyen esas certezas alguna vez en la vida. La película es una buena bofetada a esa parte de cada uno que acepta lo que viene sin cuestionar... Como yo estuve instalado allí, en ocasiones estoy y es probable que en un futuro siga estándolo en pequeñas parcelas de mi vida... me viene bien el visionado y también la recomendación. No os la perdáis. Lo remueve todo. Besotes.



martes, 13 de agosto de 2013

EL CAMINO III



Olor a hinojo borracho de rocío, campos de heno segados, golondrinas y vencejos desafiando lo adverso de un clima norteño en el mes de agosto, alguna amapola desperdigada entre ocres y tierras resecas y mi pie izquierdo palpitando un dolor profundo y enraizado que sólo consigo paliar canturreando viejos éxitos de los 80. Después de dos años de enamoramiento, el idilio continúa...



    Así vivo yo esto del "Camino de Santiago". Un viaje iniciático, sin duda, hacia los sentidos más primarios, hacia aquello que nos conecta a la tierra, eso tan ancestral que todavía persiste vital en las entrañas, por mucho que nos empeñemos en enterrarlo. Un pulso sin mediadores hacia la esencia del "yo" más descuidado, nuestro animal.
    He colocado mis posaderas 
sobre un banco en medio de la plaza desértica de un recóndito pueblo de la provincia de Burgos. Me masajeo el pie izquierdo, con intensidad obsesiva, mientras un gatito atigrado juguetea con el correaje de mi mochila y me mira curioso, con cierta expectación.
    Desde mi forzado reposo veo a la gente asomando por la cuesta, expresiones diversas retratan sus rostros  ...entusiasmo, fuerza, resistencia, dolor, desafío, arrepentimiento y en todas ellas subyace la eterna reflexión del caminante... ¿porqué? quiero decir... ¿Cuál es la razón verdadera que esconde esta deriva? En mi caso es el encuentro conmigo mismo, lo tengo claro. No es ni la fe recalcitrante, ni el deseo de

fomentar efímeras relaciones que encuentran su máximo exponente en alguna foto grupal que jamás volveré a ver, tampoco un ataque de vigorexia inconsciente y desaforada, el turismo rural o el descubrimiento de la España interior... No, no es nada de eso, aunque cualquiera de los motivos expuestos pueda resultar atractivo.    Estoy tan agotado de dar, de relacionarme, de hablar...que sólo necesito el silencio, cubrir mis necesidades 



carencias harto cultivadas a lo largo de todo el año y de esos escasos momentos 
de calma y de paz interior.
    Siento que respirar profundo en un camino empedrado, entre el cielo, la tierra y la soledad... es uno de esos placeres indescifrables de la vida en que el balance vital se automatiza y se regula de forma natural. Resurge un equilibrio inesperado en mí, una comunión que me reconcilia con todos mis demonios, jueces y espectros. Una sanación curativa. Una higiéne espiritual que cala hondo, no sé...Eso es y siento que es "el camino". Y así quiero que sea hasta que concluya.   

    Las imágenes que veis pertenecen al tramo Logroño-Burgos. "El Camino" lo voy desarrollando por partes, cada año un pedacito... Postergo el encuentro con Santiago para darle mucha entidad jejeje...Es la tercera parte, porque nunca publiqué las etapas precedentes... Lo haré prontito, prometido... Os presentaré esta trilogía a la inversa antes de que suceda el cuarto encuentro. Quedáis invitados a caminar... ¿Os apetece? Besotes.