TERAPEUTA: ¡Y te quedas tan ancho! Con, con, con esa cara de
víctima de un destino voraz, con la mirada empañada por el sentido del
abandono, la piel erizada cada vez que pronuncias la palabra soledad y toda esa
bazofia de psicótico al borde de un colapso neuronal. Eres la oportunidad
perdida, una anécdota intranscendente, un verso suelto, un tumor sin extirpar, carambola
desafortunada y pataleta a destiempo. Sí, maldita sea, eres todo eso y más ¿pero
sabes que te digo? Que tienes lo
que mereces. La gente como tú merece el maldito
agujero sin fondo en el que se hunde cada día… Basta de argumentar lo fatídico
que resulta ser diferente, basta de culpabilizar a la alineación de los astros,
basta de ver el error sólo en quien te mira mal, pero jamás en la cueva de tu
ombligo. Eres lo que has construido en la orilla del mar con el empeño de un
niño anormal, un castillo derruido y tragado por las olas. No existe una
solución aplicable, no existe ninguna fórmula que deshaga al cretino y
construya un ser equilibrado. Así que olvídate de una curación definitiva… La
idiotez es un mal endémico, extendido, asfixiante, demasiado nocivo para
obviarlo. Yo no sé, no puedo hacer nada por ti (Lanza al paciente contra el suelo y le da una patada, después le
levanta la cabeza) Eres un cadáver, eres un cadáver en vida, justo antes de
recibir el manojo de tierra sobre tu cuerpo hediondo, montón de huesos y piel
esperando que alguien lamente la partida del idiota que siempre pasó
desapercibido (Ríe) Pero nadie llora
¿Acaso no lo ves? Nadie ama. Nadie reza. No estás ya en la tierra, es la tierra
la que te engulle en una digestión infinita y poco conveniente. El mundo sigue
eliminando a estúpidos despojos sin luz propia, para poder palpitar (Hablándole al oído) Si no te mato yo
mismo es porque me mancharía con sangre bastarda, mancillada por la pobreza de
espíritu y la negligencia de ser una oveja negra sin inquietudes. Tú, pobre
mendigo de caridad. No me mires a los ojos, quiero fusilarte, aniquilarte,
quebrarte, dar sentido a mi existencia limpiando el universo de residuos que
nadie recoge. Pero no lo haré, no me implicaré en una tragedia tan poco
estimulante como esta (Lo empuja) Largo,
márchate de aquí ¿Me oyes? Desaparece y borra las huellas ¿me estás escuchando?
No quiero ser cruel contigo (El paciente
permanece en el suelo sin poderse mover, roto y vulnerable. El terapeuta
arremete de nuevo contra él con mayor intensidad si cabe) Deja de
lamentarte, das asco, vomito, me cago en tu aliento, te piso el cráneo, te
quemo los párpados, escupo tu orgullo, te trincho, me troncho, te lincho, te
pincho, te grito y desgarro, te vuelco y revuelco, te odio sin motivo y eso me
hace odiarte más ¿Por qué lloras? Nunca te harán mártir, ni siquiera te harán un
homenaje, el homenaje de los idiotas sin repercusión… Sólo conseguirás que te
desgarre el hígado, que descuartice tu estima y me coma tu pasado con salsa de
ostras, hueles a muerte, te mato, te mato, destruyo tus deseos, me meo en tu alegría, quebranto la pena, machaco
los dientes, te mato, te mato ¿Oyes la
música infernal?
¿No escuchas lo que esconden mis entrañas? Si vuelves a buscarme, si regresas algún día... me encontrarás (Sale).
Fragmento de la pieza: "Pandemia". 2012.
http://quieroserdeverdad.blogspot.com.es/2012/05/paciente-impaciente.html
Joder con el terapeuta...
ResponderEliminarLleva razón, pero se le ha ido la pinza más de lo que se le fue a uno que me discutió lo que eran las manchas de tinta!!!
Supongo que a más de uno le darán ganas de hacer una catarsis a lo bestia como a este.
Menos mal que no quería ser cruel... miedo da.
Con este a la cripta no.
Besos, cariño, y un abrazo
Este tipo representa a ese alto porcentaje de psicópatas silenciados que nos rodean día a día y de los que sabemos muy poquito, en lo concerniente a su mundo interior...No, tranquila con él sólo iríamos a protestar al Congreso o algo así...jejeje. Besines paleo-cristianos y en verso.
EliminarHijo,con terapeutas como ése,peor el remedio que la enfermedad....
ResponderEliminarBsts
Sobre todo si se ha levantado con la pata derecha y en plan catastrofista. Besotes.
EliminarFijo que debe ser caro.
ResponderEliminarTanta sinceridad vale su peso en oro.
Que cruel...
TORO: Cruel y letal por ser tempestad de palabras e imágenes que, una vez expuestas, no permiten rectificar. Un abrazo.
EliminarMelvin, pero este terapeuta está cargado de odio... supongo que esas lindezas se las dirá al paciente de la semana pasada, no? Es que desquiciaba a cualquiera.
ResponderEliminarBicos Ricos
Sí Pimpf, es la réplica al otro mostrenco, que uno no sabe ya cuál de los dos es peor el ególatra patético o el déspota acomplejado. Un besote.
ResponderEliminarPues a lo mejor es lo que el paciente necesitaba. Después de esto o reacciona o se extingue.
ResponderEliminarSe lee muy fluido, habrá que escucharlo en boca de un buen actor, creo que iría bien.
Un beso
En ocasiones necesitamos hundirnos en ese lodazal para poder relativizar. aunque es cierto que el pobre paciente ha caído desde muy alto. Besote.
Eliminar